Louise Thompson sabe cómo ocupar tu lugar en la mesa, no solo sentarte en ella.
Como ex Directora de Comunicación en NHS Improvement, conoce de primera mano cómo hacer que tu voz se escuche en una sala llena de opiniones, sin necesidad de ser la persona más ruidosa.
Ahora transforma ese aprendizaje en lecciones como Leadership Coach, ayudando a líderes (y a quienes aspiran a serlo) a crear impacto con confianza.
Amistad o liderazgo: el dilema social de dirigir un equipo
Cada persona líder se enfrenta a una elección: ser amiga de todo el mundo, ser una jefa eficaz… o un poco de ambas cosas. Pero caminar por esa fina línea puede ser complicado.
La trampa del “jefe guay”
Sobrepasar el límite de la amistad puede jugar en tu contra. Aunque reprimir el deseo natural de caer bien es difícil, la experta en liderazgo Devora Zack advierte que, para quienes dirigen, puede ser necesario:
Intentar ser amiga de tu equipo dificulta dar feedback y hacer evaluaciones de desempeño, y te expone a acusaciones de favoritismo.

Y los datos lo confirman: el 62 % de las personas trabajadoras cree que las relaciones personales influyen en la dinámica de equipo, generando conflictos de interés y menor productividad.
Si ser demasiado cercana compromete el rendimiento, no ganarás simpatía: terminarás generando resentimiento. Como resume Zack:
Te querrán más cuando te preocupes menos por caer bien y más por dar orientación y apoyo.
El liderazgo del miedo
Pero renunciar a la popularidad no significa perder la humanidad. Con un 65 % de los casos de acoso laboral protagonizados por jefes, parece que muchas personas confunden autoridad con dureza.
¿Podrían algunos de estos casos ser intentos mal enfocados de mostrar autoridad?
Sea como sea, conviene tener cuidado: la mitad de quienes valoran mal a su manager planean dejar la empresa en el próximo año.
El equilibrio del liderazgo
La realidad es que no hay que elegir solo un extremo.
Las personas líderes deben ganarse el respeto antes de buscar amistad, tomar decisiones difíciles pero preocupándose del impacto que tienen.
Así podrán construir equipos que confíen en su capacidad… y que aun así quieran invitarles a comer.
3 lecciones sobre gestión de personas (que nadie te cuenta)
🚀 Por Lauren Schuivens, fundadora de Samavira Meditation

1️⃣ Tu negocio solo crece tanto como tú
Gestionar personas empieza por gestionarte a ti misma.
Cuanto más trabajes tu paciencia y autoconciencia, más espacio crearás para que tu equipo prospere.
El liderazgo no consiste en tener todas las respuestas, sino en estar presente y dispuesta a aprender.
2️⃣ Las personas siguen la energía, no solo los planes
Puedes tener la hoja de ruta perfecta, pero si tu energía no acompaña, el equipo lo notará.
Lo que motiva no es solo el sueldo, sino el propósito, la presencia y sentirse valoradas.
En especial en sectores de bienestar, liderar con autenticidad y vulnerabilidad marca el tono de toda la cultura.
3️⃣ Gestionar personas es gestionar incertidumbre
Por mucho que planifiques, las personas no siempre son predecibles, y ahí reside tanto el reto como la belleza del liderazgo.
Necesitarás navegar necesidades, emociones y dinámicas cambiantes.
La clave está en mantenerte abierta, curiosa y flexible, igual que al desarrollar un producto o un embudo de ventas.
53% de managers están hartos de su trabajo. Y lo entendemos.
⚡ Descarga aquí el reporte con las opiniones de más de 1000 managers de Europa.

