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Finanzas

Mitos y realidades sobre la retribución flexible

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7 minutos de lectura
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La retribución flexible ha ganado popularidad en las empresas españolas como una herramienta para mejorar la compensación de los empleados. A pesar de esta tendencia al alza, existen una serie de mitos y creencias erróneas en torno a esta práctica que siguen dificultando su comprensión y adopción.

Aunque pueda parecer complejo apostar por un plan de retribución flexible, la realidad es que es una modalidad de compensación sencilla de implementar y beneficiosa tanto para la empresa como para el empleado. 

Esta falta de información lleva las dudas a responsables y trabajadores, generando desconfianza en una práctica con capacidad para generar muchos beneficios y ventajas competitivas. Por ello, vamos a abordar en este artículo los mitos y realidades sobre la retribución flexible, aclarando las falsas ideas preconcebidas sobre este sistema de compensación salarial. ¿Estás listo para descubrir la verdad sobre la retribución flexible y cómo puede beneficiar a tu empresa y a tus empleados?

Mito 1: Es muy difícil de implementar y de gestionar. «Supone mucho papeleo»

La retribución flexible a menudo se percibe como un sistema complejo y burocrático. Sin embargo, la realidad es muy diferente. Con las herramientas adecuadas, su implementación puede ser sorprendentemente sencilla. El uso de plataformas online intuitivas permiten a las empresas configurar y gestionar estos planes de forma eficiente, minimizando el papeleo y los dolores de cabeza administrativos.

Con ellas, los departamentos de Recursos Humanos pueden configurar sistemas con pocos clics, diseñando programas personalizados sin necesidad de complejos trámites administrativos. Además, gestionar la retribución flexible puede hacerse tanto de forma interna, aprovechando el conocimiento del equipo, o externalizar este trabajo a expertos en el campo, ideal para empresas más pequeñas y con menos recursos propios. 

Esta versatilidad permite a cada empresa elegir el enfoque que mejor se adapte a sus recursos y necesidades, garantizando una implementación fluida y sin complicaciones. Una vez implementado el programa, su funcionamiento resulta sorprendentemente sencillo. Los trabajadores acceden a través de plataformas digitales, seleccionan sus beneficios y los departamentos de Recursos Humanos supervisan el proceso sin ningún esfuerzo adicional.

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Mito 2: No interesa a los empleados

Contrario a lo que muchos creen, la retribución flexible despierta un gran interés entre los trabajadores. Según Edenred, alrededor del 40% de los empleados se suma a estos planes cuando se les ofrece de manera adecuada.

Otro estudio de Pluxee, empresa global en servicios de engagement y beneficios sociales, señala que el 73% de los profesionales considera que beneficios laborales como la retribución flexible son la mejor vía para reforzar su vinculación con la empresa. 

No obstante, el secreto para atraer a los empleados está en presentar y ofrecer opciones que se ajusten a sus necesidades reales y comunicarlas de forma clara y efectiva. Sobre este punto, es importante subrayar que los trabajadores valoran enormemente la flexibilidad que ofrece este sistema para adaptar su salario a sus circunstancias personales

De ahí la importancia de dar el mayor número de opciones posibles. Poder elegir entre beneficios como vales de comida o el cheque gourmet, transporte público o seguros médicos ofrece una capacidad de elección que va a captar la atención de los miembros de la plantilla al contar con más alternativas a la hora de sacar el máximo partido a su salario bruto

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Mito 3: La retribución flexible solo beneficia a los empleados

La retribución flexible es un sistema win-win que beneficia tanto a empleados como a empresas. Los trabajadores obtienen ventajas fiscales y mayor poder adquisitivo, pero las organizaciones también ganan sin aumentar sus costes salariales. ¿Cómo lo consiguen?

Por un lado, mejoran su imagen corporativa y se posicionan como empleadores atractivos. Esto les ayuda a atraer y retener talento en un mercado cada vez más competitivo y con una alta rotación laboral. Además, al ofrecer beneficios personalizados, las compañías demuestran que valoran las necesidades individuales de sus empleados, lo que aumenta la lealtad y el compromiso de los equipos.

Además, con una estudiada planificación, las organizaciones cuentan con una herramienta para aumentar el salario limpio de sus empleados sin incrementar sus costes. Esto les da la oportunidad, sobre todo a las pequeñas y medianas empresas, de ofrecer remuneraciones más competitivas, equiparándose e incluso superando los sueldos de la competencia.

Mito 4: Es costoso para la empresa

Otra idea errónea que es necesario desmitificar. La retribución flexible no supone un incremento en los costes para la empresa. De hecho, este sistema permite aumentar el salario neto de los empleados sin que la organización tenga que desembolsar más dinero. ¿Cómo es posible? Aprovechando los beneficios fiscales de este modelo de compensación.

Además, las empresas pueden desgravar del Impuesto sobre Sociedades el 100% de los gastos en productos y servicios ofrecidos como parte del salario en especie. Esto significa que, mientras los empleados disfrutan de ventajas en su IRPF, la empresa mantiene sus costes bajo control y se beneficia también de otras rebajas. Es una situación en la que todos ganan.

Desde el punto de vista de la gestión, como ya hemos visto, la implementación de un programa de retribución es sencilla y puede adaptarse fácilmente a las necesidades de cada miembro del equipo sin generar costes, ni económicos ni de tiempo. Aumentar la satisfacción de los empleados y optimizar los recursos de la empresa nunca ha sido tan sencillo ni económico como sucede con la retribución flexible

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Mito 5: La nómina no puede parametrizarse y es difícil de gestionar

Los cambios en la nómina para implementar la retribución flexible son sorprendentemente fáciles de aplicar. Con la tecnología adecuada, como plataformas digitales especializadas, la parametrización se vuelve un proceso fluido y automatizado, permitiendo a las empresas adaptar fácilmente sus planes de compensación sin complicaciones administrativas.

La existencia de herramientas tecnológicas, como la nuestra de Factorial, es fundamental para que las retenciones como los beneficios del plan de retribución flexible aparezcan correctamente documentados en la nómina y garantizar tanto la transparencia para el empleado como el cumplimiento normativo. 

Por ello, la plataforma ideal para gestionar la retribución flexible debe ser una “todo-en-uno”, ofreciendo flexibilidad adecuada para adaptarse a las necesidades cambiantes de la empresa y de sus empleados. Por suerte, ya existen soluciones que permiten modificar beneficios, ajustar límites fiscales y actualizar opciones con facilidad desde una interfaz intuitiva

Mito 6: Cobrar menos afecta al paro y a la jubilación

Por último, llegamos a uno de los temores más comunes: la retribución flexible va a reducir nuestras prestaciones futuras como pueden ser el paro o la jubilación. Sin embargo, este miedo carece de fundamento. Recibir parte del sueldo en forma de cheques o tarjetas, como ocurre en los planes de retribución flexible, no afecta negativamente al cálculo de estas prestaciones. 

La base de cotización se mantiene intacta, por lo que los derechos laborales a largo plazo están protegidos. Al respecto, hay que recordar que la cotización se calcula en función del salario bruto del trabajador. Un importe que no se altera por participar en un plan de retribución flexible. 

De hecho, la ley establece que los beneficios obtenidos mediante este sistema no pueden superar el 30% del salario anual total para garantizar un equilibrio entre los beneficios inmediatos y la protección futura del trabajador. Así que desmitificamos esta idea: al mantener la base de cotización, se asegura que el finiquito, el paro y la jubilación se calcularán sobre el salario bruto original

Mito sobre la retribución flexible

Realidad

Mito 1: Es muy difícil de implementar y de gestionar. Supone mucho papeleo Realidad: Con las herramientas adecuadas y plataformas online intuitivas, su implementación puede ser sorprendentemente sencilla. Se pueden configurar y gestionar planes de forma eficiente, minimizando el papeleo. Las empresas pueden optar por gestionarlo internamente o externalizarlo a expertos.
Mito 2: No interesa a los empleados Realidad: La retribución flexible despierta un gran interés entre los trabajadores. Alrededor del 40% de los empleados se suman a estos planes cuando se les ofrece de manera adecuada. El 73% de los profesionales considera que los beneficios laborales como la retribución flexible representan la mejor vía para reforzar su vinculación con la empresa.
Mito 3: La retribución flexible solo beneficia a los empleados Realidad: Es un sistema win-win que beneficia tanto a empleados como a empresas. Las empresas mejoran su imagen corporativa, atraen y retienen talento, y aumentan la lealtad y el compromiso de los equipos. Además, pueden aumentar el salario neto de sus empleados sin incrementar proporcionalmente sus costes.
Mito 4: Es costoso para la empresa Realidad: No supone un incremento en los costes para la empresa. Permite aumentar el salario neto de los empleados aprovechando las ventajas fiscales que ofrece este modelo de compensación. Las empresas pueden desgravar del Impuesto sobre Sociedades el 100% de los gastos en productos y servicios ofrecidos como parte del salario en especie.
Mito 5: La nómina no puede parametrizarse y es difícil de gestionar en nómina Realidad: Los cambios en la nómina son sorprendentemente sencillos de aplicar con las herramientas adecuadas. La parametrización se vuelve un proceso fluido y automatizado.
Mito 6: Cobrar menos afecta al paro/jubilación Realidad: Este miedo carece de fundamento. La base de cotización se mantiene intacta, por lo que los derechos laborales a largo plazo están protegidos. La cotización se calcula en función del salario bruto, que no se altera por participar en un plan de retribución flexible.

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Más allá de las falsas creencias: retribución flexible como impulsora del bienestar laboral

En este artículo, hemos echado por tierra muchos de los mitos erróneos que hay sobre la retribución flexible, poniendo de manifiesto que es una modalidad que ofrece ventajas tanto a empleados como a empresas. 

Los primeros disfrutan de un aumento en su salario disponible, mayor flexibilidad y un mejor equilibrio entre vida laboral y personal. Las segundas se benefician de un incremento en la motivación y productividad de sus equipos, mejoran su imagen corporativa y ganan capacidad para atraer y retener talento. 

Pero, para conseguir todas estas ventajas y aplicarlas de forma sencilla, es esencial diseñar un plan de retribución flexible basado en una evaluación cuidadosa de la situación actual de la empresa y las necesidades de sus empleados. Además, comunicar el plan de manera clara y efectiva es crucial para asegurarse de que todos comprenden sus beneficios. 

Con todo esto claro, tan solo hará falta seleccionar un socio y una plataforma tecnológica adecuada para que tanto la empresa como los empleados puedan obtener el máximo provecho de este sistema de salario en especie.

Esta desmitificación que hemos hecho de algunas de las falsedades más comunes sobre la retribución flexible nos va a ayudar a aprovechar y poner en valor sus beneficios. En la era actual, la tecnología, la cultura centrada en el empleado y la mejora continua de la experiencia laboral son pilares fundamentales.

La retribución flexible encarna estos principios, ofreciendo soluciones innovadoras que benefician tanto a empleados como a empresas. ¿Quieres optimizar tus recursos humanos y construir un entorno laboral más atractivo y satisfactorio para todos? Conoce Factorial.

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